Cocinas en isla o con isla – Características, comprar…


Cocinas en isla o con isla

Comprar cocinas

Por excelencia, dentro del diseño de interiores, la cocina con isla ya no solo proporciona belleza o mucho juego con otras piezas de mobiliario que son minimalistas, sino que también es sinónimo de lujo (De interés, el artículo sobre estilo de decoración minimalista en viviendas).

Este tipo de cocina distribución es la que más ayuda a la apertura del espacio y a compartir experiencias en esta zona. Lo más importante es tener suficiente espacio para la correcta circulación y uso de cada zona, contando con los muebles adecuados.

La utilización de la isla es independiente a la gestión del resto de mobiliario de cocina de pared que podrá ir en línea, L o U, dependiendo una vez más de las necesidades y espacio con el que se cuenta.

Podemos darle diferentes usos dependiendo de las necesidades del usuario: zona de apoyo, de cocinado y/o lavado, incluso añadir un mesado para comer (altura mesa tradicional) o barra de desayuno con taburetes.

Cocina isla

Debemos prestar atención a las instalaciones antes de proyectar este tipo de cocina, así como a las especificaciones técnicas de los electrodomésticos que se vayan a instalar en la isla.

Por sus características, necesitamos espacios amplios. Es una opción versátil, que bien planteada, incluso podremos cambiar la distribución modular si la isla tiene rueda (Solo almacenamiento).

Primero, ¿Qué tipos de cocinas islas existen? Al ser un módulo, generalmente según sus características y nuestras necesidades, existen tres tipos u opciones de piezas:

  • Isla de apoyo. Donde tú funciona es de almacenaje y de ayuda – apoyo gracias a su encimera que estará totalmente despejada.
  • Isla de cocinado y lavado. En las tiendas es la más demandada dónde encontramos la vitrocerámica (zona de cocción con su campana extractora) y el fregadero para lavar utensilios (dependiendo del tamaño de la cocina, podemos incluir uno o dos de los elementos nombrados).
  • Isla de desayuno o de comida informal. Está puede estar formada por cualquiera de las islas anteriores y simplemente añadimos una zona para poder desayunar o comer.

El tipo de isla que elijamos determina las instalaciones que tiene que llevar, es decir, si elegimos una isla con vitrocerámica, pues tenemos que llevar la alimentación eléctrica o el gas, e incorporar una zona de extracción. Lo mismo si elegimos una isla que lleva incorporado un fregadero, tenemos que llevar la fontanería y saneamiento.

Cuando empezamos una obra nueva, la distribución de isla de cocina que podamos adquirir para nuestra cocina nos dará igual, pero, si estamos tratando con una reforma de la vivienda, aquellas islas que contengan el fregadero o la zona de cocción, no siempre serán posibles por las instalaciones.

Definido el uso de nuestra isla toca hablar de dimensiones y aquí viene la pregunta… ¿Cuánto debe medir mi cocina para que dentro me quepa una isla y que lo haga de manera totalmente funcional?

Lo preferente siempre es buscar dimensiones estándar de los fabricantes para que el presupuesto no se dispare. En principio para una Isla de apoyo, los muebles en fondo suelen ser de 60 cm, 35 o 30 cm y en ancho, para una isla, el mínimo debería de ser de 1,20 metros.

Cuando hablamos de una cocina con isla que incluye una vitrocerámica y un lavabo aquí las dimensiones empiezan a aumentar de tamaño, pero siempre debemos de respetar unos mínimos coherentes y saber que:

  • Tanto fregadero como la vitrocerámica siempre se cagan en muebles de 60 cm de ancho.
  • La parte frontal del fregadero y la zona de cocción debe de tener un espacio libre entre 30 y 35 cm (estás dimensiones corresponden a un módulo mueble estándar).
  • Debe de haber una separación mínima entre la vitrocerámica y el fregadero, que normalmente será de 60 centímetros que corresponde un módulo mueble.
  • En los laterales de la isla, también debe de existir una pequeña separación por comodidad y limpieza, que suele ser entre 30 y 35 cm.

Las cocinas en isla son las que más espacio demandan, ya que lo ideal es que haya al menos unos 90cm para el tránsito alrededor de todas las caras de la isla. Lo más habitual es incorporarlas en proyectos en lo que se busca un espacio diáfano u Open Concept uniendo el salón a ella. La isla permite crear desde un espacio de trabajo hasta un espacio para comer, según necesidades de cada proyecto.

Las cocinas tipo isla destacan por su amplitud y elegancia, ya que permiten realizar diferentes funciones a la vez, como cocinar y comer en la propia cocina. Es cierto, que aportan un plus de distinción y funcionalidad al hogar, pero es necesario tener un espacio amplio. Estamos hablando de una opción versátil, en la que, si la isla tiene ruedas, se puede cambiar la distribución en cualquier momento.

Existen tres tipos de cocinas en isla, y son los siguientes:

  • Isla de cocina y de lavado: normalmente es la más demandada del mercado, pudiendo encontrar en ella la vitrocerámica y el fregadero.
  • Isla de apoyo: por otro lado, en este tipo de cocinas, la isla funciona principalmente de almacenaje y de ayuda, ya que la encimera se encontrará despejada totalmente.
  • Isla de desayuno o de comida: en este caso, la isla puede convertirse en el sitio ideal para desayunar, comer o merendar, por ejemplo.

Comprar cocinas