¿Qué es un cronógrafo?


Cronógrafo

Un cronógrafo es una función del reloj que permite contabilizar tiempos cortos a demanda. Aunque siempre se le confunde con un cronómetro, son cosas distintas. Un reloj puede ser certificado como cronógrafo si incluye la función, pero un cronógrafo no puede ser considerado cronómetro. Son analógicos, presentando en general dos pequeñas esferas adicionales (una para las horas y otra para los minutos) que se suman a la esfera central con la aguja que indica los segundos. Entre las tres, indican el número de revoluciones de la aguja central. Usualmente al menos una de las agujas puede ser detenida y reiniciada. Permite medir velocidades, y antiguamente los médicos lo utilizaban para controlar el pulso del paciente.

El funcionamiento usual de un cronógrafo consiste en empezar a contar desde cero al pulsarse el mismo botón que lo detiene. Además, habitualmente, pueden medirse varios tiempos con el mismo comienzo y distinto final. Para ello se congela los sucesivos tiempos con un botón distinto, normalmente con el de reinicio, mientras sigue contando en segundo plano hasta que se pulsa el botón de comienzo.

Para mostrar el segundo tiempo o el tiempo acumulado, se pulsa reset o reinicio.

Los cronógrafos pueden activarse con métodos automáticos, con menor margen de error y sin necesidad de un actor. Algunos de estos sistemas son: el corte de un haz luminoso o la detección de un transceptor o, por ejemplo, en los ciclocomputadores pueden ser activados por el movimiento de la rueda.

Son habituales las medidas en centésimas de segundo, como en los relojes de pulsera o incluso milésimas de segundo.

Está extendido su uso en competiciones deportivas, existiendo diferentes aparatos y funciones específicas para cada especialidad, así como en ciencia y tecnología.