Hornos de cocina convencionales: características, comprar…
Comprar horno para la cocina
Busque, compare y encuentre el mejor horno para su cocina:
Se trata de los “hornos de toda la vida”. Se trata de un electrodoméstico que únicamente calienta una serie de resistencias alojadas en las partes superior e inferior del mismo hasta alcanzar la temperatura indicada. Permiten la opción de generar calor desde arriba, desde abajo o desde ambas direcciones.
Es el típico horno de toda la vida, funciona con una resistencia en la parte superior y otra en la parte inferior, y básicamente tiene tres funciones: Sólo calentamiento inferior, sólo calentamiento superior “grill” o combinando las dos cosas a la vez. Su principal característica es la sencillez, facilidad de uso y precio, son los más económicos. Recomendable para los que van a utilizarlo simplemente para calentar o gratinar o para los que no les guste cocinar y prácticamente no van a utilizarlo.
Es el más común de todos los hornos y también los más económicos, sus modos de cocción suelen ser bastante sencillos como calentar arriba, calentar abajo o calentar arriba y abajo simultáneamente. Se recomienda para personas que no le den mucho uso al horno o que lo gasten sólo para calentar o gratinar.
Quiero hacer asados tradicionales. El clásico horno de siempre es el convencional que cocina calentando el aire de su interior con un par de resistencias: una colocada en la parte superior y otra en la inferior del mismo. Es el horno más fácil de encontrar y con más variantes: precios, gamas… Tanto las marcas más populares del sector como las menos conocidas o las que dominan el sector lowcost fabrican hornos convencionales.
La función elemental en todo horno de convención es el calor arriba y abajo, es lo más esencial. Lo más fácil es que un horno básico y de bajo presupuesto tenga solo esta posibilidad, pero con la opción de combinarlas o usarlas en solitario. Si tienes problemas para ubicar el horno, este tipo pueden ponerse empotrados, pero también son habituales pequeños modelos de sobremesa que no necesitan instalación alguna.
La oferta de hornos convencionales no es tan numerosa porque la demanda es más bien escasa porque la mayor parte de compradores buscan hornos con al menos función grill. No obstante, puedes encontrarlos en tiendas tanto físicas como online. No suelen tener precios elevados, pero tampoco incorporan funciones innovadoras o muy prácticas como la autolimpieza o la posibilidad de gratinar.
Podríamos decir que los hornos de cocina convencionales o estáticos son los hornos de toda la vida. Este tipo de horno calienta a través de sus resistencias que comúnmente están colocadas en la parte inferior y superior del cavidad interior del aparato. El aire caliente es el que cocina los alimentos.
Esta es la gama más extendida del mercado, aunque más limitados en cuanto a prestaciones por ser la opción más básica. Pronto conocerás alternativas muy suculentas…
Su precio oscila entre los 199 y los 299 euros.
Un horno convencional o clásico se puede encontrar en la mayoría de las estufas, ya que es un complemento para la cocina muy útil. Este aparato genera aire caliente para el horneado y puede funcionar de dos diferentes formas: con combustible o una resistencia eléctrica. En el primer caso, el flujo de gas se mantiene constante y así se mantiene la temperatura ideal en el horno. Pero, con el sistema eléctrico, primero calienta el aire un termostato para encender y apagar varias resistencias, con el fin de mantener la temperatura en el mismo nivel.
Otra característica importante de estos hornos, es que se deben precalentar antes de introducir los alimentos a cocinar y es recomendable estar vigilando su uso. Este electrodoméstico suele cocer mejor al colocar el platillo en la parte más cercana a la fuente de aire. De esta forma, el sistema de cocción tiene una mayor efectividad dependiendo del lugar donde se coloque el recipiente, así que lo más recomendable es ubicarlo en la parte de arriba o la rejilla más alta para lograr una cocción completa.
Un horno clásico o convencional podemos encontrarnos en muchos hogares, ya que es un complemento de cocina muy útil. Este aparato crea aire caliente para hornear y puede funcionar de dos maneras distintas: con combustible o con resistencia eléctrica.
En el primer caso, el flujo de gas es constante y de esta forma mantiene la temperatura ideal en el horno. Pero, en el caso del sistema eléctrico, primero el aire se calienta ayudado de un termostato para encender y apagar las resistencias para mantener la temperatura en un mismo nivel.
Otro factor que los diferencia es que se han de precalentar con anterioridad para poder cocinar los alimentos y se recomienda vigilar su uso. Este electrodoméstico suele funcionar mejor si colocamos el alimento en la parte más cercana de la fuente de aire. Es decir, el sistema de cocción es más o menos efectivo en función del lugar donde se coloque el recipiente, por lo que es más recomendable ubicarlo en la parte superior para lograr una cocción más completa.