Cómo funcionan las planchas de vapor


Cómo funcionan las planchas de vapor

Una plancha de vapor es un tipo de plancha para ropa que alisa los tejidos mediante presión, calor y vapor, generando vapor de agua que sale por la suela de la plancha y ablanda las fibras de los tejidos con la humedad que produce, lo que hace que el planchado sea más fácil, cómodo, cuidadoso y eficaz.

Comprar planchas de ropa

Todas las planchas de ropa: tipos y características

La plancha de vapor es una plancha que además de calentar la suela con resistencias térmicas, cuenta con un depósito de agua para generar vapor y expulsarlo a través de orificios localizados en la suela del aparato. Con ello se facilita el planchado ya que se obtienen mejores y más rápidos resultados.

Las planchas de vapor generan el calor y el vapor por sí mismas. Al planchar con una plancha de vapor se hace uso de:

  • La elevada temperatura.
  • El vapor de agua.
  • La presión sobre la ropa, que es ejercida tanto por el usuario como por el peso de la plancha.

La capacidad del depósito de agua en una plancha de vapor puede llegar a ser de hasta poco menos de medio litro, aunque por lo regular es menor, por lo que es necesario irla rellenando periódicamente. Cuanto mayor sea el tamaño del depósito, menos veces tendrá que rellenarse.

Si se utiliza agua del grifo corriente y en función de sus características, la constante evaporación del agua puede ocasionar la acumulación de cal dentro del aparato, así como provocar cercos blancos en la ropa. Para su limpieza se deben seguir las instrucciones específicas de cada modelo, generalmente se usan pastillas antical. Algunas planchas de vapor cuentan con un sistema de autolimpieza y pueden ser utilizadas con agua corriente. En cambio en otras, se recomienda el uso de agua destilada, para una mayor durabilidad.

En las planchas de vapor se cuenta con regulador de temperatura o termostato, de tal manera que se puede ajustar la temperatura de la plancha a la temperatura máxima de planchado de cada tejido.

Otro punto de gran importancia en las planchas de vapor es la potencia de emisión de vapor, es decir, la cantidad de vapor que expulsa la plancha, que usualmente se mide en gramos/minuto. En las planchas de calidad, esta potencia es regulable en forma manual mediante un regulador de la cantidad de vapor. Se debe hacer notar que una plancha cuya suela cuenta con un mayor número de perforaciones emite mayor cantidad de vapor.

La potencia de emisión de vapor está directamente relacionada también con la potencia de la plancha, que se mide en vatios. Por ello, una plancha que alcance altas temperaturas para una buena generación de vapor, suele tener un mayor consumo de energía eléctrica. Cuanto mayor sea la potencia, más rápido se calentará la suela para poder empezar a planchar, aunque el tiempo de calentamiento dependerá de la temperatura que se haya seleccionado.

En algunos casos, el vapor y la temperatura no son suficientes para alisar las prendas, por lo que las planchas disponen de una función de spray o ráfaga de vapor, para humedecerlas más, que consiste en dejar salir súbitamente una gran cantidad de vapor con tan solo oprimir un botón. Esto permite también planchar prendas delicadas únicamente con el vapor, sin necesidad de tocarlas con la plancha.

Algunas planchas disponen de función de planchado vertical, de tal manera que el vapor continúa saliendo aunque la plancha no esté en posición horizontal, lo que resulta de gran utilidad para retocar en posición vertical camisas, chaquetas o vestidos que estaban planchados.