Ventajas de los platos de ducha frente a las bañeras
Hay que decir la verdad, son más los pro que los contras a la hora de cambiar bañera por ducha. En primer lugar vamos a referirnos a algunas de las ventajas.
Los platos de ducha dan más amplitud
Esto es una realidad, cuando se trata de baños pequeños, lo mejor es apostar por un plato de ducha. Las duchas despejan muchísimo el espacio, haciendo que, al ojo humano, el baño parezca mucho más amplio. Además, debemos tener en cuenta que hay diferentes tipos de platos de ducha y de diferentes medidas, incluso los más pequeños que se adaptan a cualquier rincón. Estos platos harán que se pueda aprovechar muchísimo mejor el resto del espacio.
Si además nos centramos en las tendencias decorativas actuales, los platos de ducha extraplanos pueden ser una de las mejores opciones para ganar metros visuales en el cuarto de baño. Son súper ligeros, muy poco aparatosos y elegantes. Con una mampara de cristal, podemos hacer que nuestro baño parezca bastante más amplio.
Ahorro de agua y cuidado del medio ambiente
Con un plato de ducha somos mucho más cuidadosos con el medio ambiente. Tan sólo debemos pensar en la cantidad de agua que se necesita para llenar una bañera. Ahora, ¿cuánto tiempo promedio tardamos en ducharnos? Por dónde busquemos, es mucho menos tiempo y agua que el que empleamos en bañarnos, ¿verdad? Sin duda… Y esto termina traduciéndose en ahorro de agua. Por un lado estamos cuidando de nuestras reservas de agua potable, y esto termina significando un ahorro en la factura de agua.
Cambiar la bañera por un plato de ducha es un plus decorativo
Para gustos colores, no obstante, podemos decir que los platos de ducha son bastante más modernos. Por lo menos, dan una estética más actual. Los platos de ducha son tendencia. Además, en este punto también podemos hablar de la gran variedad de diseños y colores que podemos encontrar en el mercado.