Tipos de baldosas


Tipos de baldosas


Baldosas de Piedra

Debido a su resistencia y a que no sufren desgastes notorios con el paso del tiempo, las baldosas de piedra, muy indicadas para exteriores, también pueden ser utilizadas en interiores o en zonas donde haya mucho tránsito de personas.

Hay varias piedras que se usan como pavimento. Las principales son:

Mármol

El mármol es un material calizo, poroso y bastante delicado. Inconvenientes, muchos: sus altos precios, difícil de limpiar (por ser un material poroso absorbe los líquidos con bastante facilidad dejando marcas), se raya con facilidad y soporta pocos productos de limpieza. Ventajas: su belleza y el distintivo de categoría social.

Granito

El granito pulimentado da posibilidad de baldosas muy bellas y resistentes. Además permite, con espesores relativamente reducidos, hacer baldosas de tamaños considerables. Sin pulir, y en tamaños grandes, se utiliza mucho como pavimento de aceras y de calles.

Pizarra

La pizarra, bien pulimentada, bien sin pulimento, se ha utilizado frecuentemente en solados. Hace años, era frecuente encontrar suelos ajedrezados combinando pizarra con mármol blanco.


Baldosas de Cemento

Las baldosas de cemento, o baldosas hidráulicas, están fabricadas con cemento compacto. Su superficie se colorea con pigmentos, de color liso o formando dibujos. Fueron producidas y utilizadas tradicionalmente desde finales del siglo XIX, en zonas urbanas del mediterráneo: Francia, península ibérica, Italia y antiguas colonias europeas del norte de África y Latinoamérica. La imitación piedra es otra de las opciones similares.


Terrazo

El terrazo es una versión de la baldosa hidráulica en la que se dejan aparentes en la superficie las piedras que la forman, bien pulimentadas, y dan el aspecto final. Se emplean piedras de diversos tamaños, según el aspecto que quiera obtenerse. Se limpia fácilmente y es un material muy duro que soporta bastante bien las inclemencias del tiempo. Ha caído en desuso frente a otros materiales más modernos.


Baldosas de Cerámica

La cerámica es un material muy utilizado, ya que se comercializa con diferentes acabados, diseños y estilos. Se compone de arcillas, fundentes, sílice, productos colorantes y otros materiales. Se fabrica con acabado vidriado o sin él. De este último caso son ejemplo (en España) el baldosín catalán, delgado, y la baldosa de Ariza, gruesa y de dimensiones imperfectas. Para impermeabilizarla de las posibles manchas, cuando se coloca en el suelo, requiere un tratamiento, en general a base de aceite de linaza y vinagre.

Con acabado vitrificado, es un material impermeable y resistente en función del grosor. Al contrario que las antiguas baldosas de pared de las edificaciones romanas, amplias y artísticamente trabajadas, la baldosa moderna tiende a ser más pequeña (baldosín) y menos elaborada. En este apartado cabría citar al azulejo.


Gres porcelánico

Una variante de la baldosa cerámica es el gres porcelánico; es duro, resistente y poco poroso. Su precio es elevado frente a otros materiales. Se limpia fácilmente y soporta cualquier producto de limpieza.


Baldosas de Metal

Menos utilizadas, las baldosas metálicas se emplean en paneles de proteccíon de la cocina y en zonas expuestas al vertido de productos químicos porque es fácil de limpiar.


Baldosas de Madera

Aunque ahora se usan poco, hace años fue corriente una baldosa de tipo hidráulico (de cemento) en cuya capa superior había unas delgadas tiras de madera pegadas, que se llamaban entonces (en España) con el impropio nombre de parquet.